El correctora fue creado al principio para disimular cicatrices, pero cuando las mujeres se dieron cuenta que este maravilloso cosmético también tapaba manchas se convirtió en el articulo de maquillaje imprescindible.
Existen correctores para ocultar imperfecciones de la piel y otros que son difusores de luz, para iluminar.
Cuando la piel necesita de una ayuda, los correctores hacen su función. Cubren problemas que el simple maquillaje no lo hace. Los correctores ocultan manchas, s¡disimilan ojeras, tapan acné. Los correctores que contienen difusores de luz difuminan las arrugas, y algunos hasta cicatrices, marcas y áreas despigmentadas.
Para que el maquillaje quede perfecto recuerden aplicar correctores adecuados a su tono de piel.
Los correctores vienen en crema, líquidos, en barra, en lápiz. Los correctores en crema proporcionan una cobertura entre ligera y media con un acabado aterciopelado. Los puedes aplicar con facilidad, aunque se puede depositar en las lineas de expresión. Es excelente para disimular ojeras, granos, erupciones.
Los correctores líquidos dan cobertura ligera con aspecto más natural; no es muy recomendable para manchas muy visibles. Es bueno para ojeras suaves y partes enrojecidas. Los correctores en barra dan una cobertura total, oculta muy bien cicatrices, y ojeras muy fuertes. El corrector de lápiz es para retoques rápidos.