Ser madre es uno de los momentos más bonitos en la vida de una mujer, pero las madres primerizas no tienen la tarea fácil, hay muchos miedos, inquietudes, muchas dudas y es por eso que te traemos consejos útiles para ese momento tan especial.
Los consejos que Entrebellas trae para las madres primerizas son:
- No te preocupes si notas algunas venas marcadas en tu rostro. Se deben al parto natural y al esfuerzo que realizaste al pujar.
- Si sudas mucho en la noche no te preocupes, eso se debe al líquido acumulado en el embarazo que el cuerpo necesita drenar.
- Si te practicaron cesárea no debes levantar peso durante seis meses.
- Pide ayuda cuando lo necesites. Cuidar a un bebé consiste en mucho esfuerzo y puedes agobiarte y frustrarte.
- No dejar que ningún familiar cargue al bebé es un poco exagerado, pero si alguno está enfermo es una reacción entendible para evitar que el pequeño se contagie (Sólo en casos de enfermedad viral).
- Baña al bebé tres o dos veces por semana, no lo hagas todos los días ya que podrías alterar el manto graso de su piel.
- Todos los objetos del bebé deben estar muy limpios, pero no los esterilices para que el bebé tenga contacto con las bacterias que le ayudarán a desarrollar sus defensas, pero no las suficientes para que se enferme. Ten especial cuidado con los bebés prematuros, con ellos se debe tener una muy excelente higiene sobre todo en sus primeras semanas.
- No metas al bebé en tu cama porque puedes quedarte dormida y asfixiarlo sin querer o acostumbrarlo a dormir contigo y te costará corregirlo en el futuro.
- El pañal debe cambiarse 12 veces al día. Después de cada cambio de pañal lava sus pompis con agua tibia y sécalo bien. Puedes dejarlo un rato sin pañal para que esa área respire y evitas las irritaciones. Así que madres primerizas hacer todo con amor.
- La leche materna es el mejor alimento que puedes darle a tu bebé.
- Todo lo que tú comas o bebas será transmitido al bebé a través de la leche. Evita la cafeína y el alcohol.
- Estas son alguna razones por las que tu bebé puede llorar:
– Cambio de pañal
– Tiene hambre o sed
– Tiene sueño
– Tiene frío o calor
– Siente alguna molestia o dolor
Si notas que ninguna de estas son las razones, puede ser que el bebé esté pidiendo cariño, en ese caso cárgalo y haz que se sienta seguro y querido.
